Diego Rivera, pintor muralista mexicano, uno de los más representativos del arte moderno, contemporáneo y de vanguardia, que supo reflejar en sus grandes obras la historia y la vida social de México. Casado con su compatriota, la pintora Frida Kahlo, sus murales lucen hoy en los edificios públicos de su país.
En el apogeo de su carrera, Diego Rivera era una celebridad internacional del arte. Formado en la Escuela Nacional de Bellas Artes en la Ciudad de México, pasó más de una década en Europa, convirtiéndose en una figura destacada en la bulliciosa comunidad internacional de artistas de vanguardia de París. Allí, desarrolló su propia marca de cubismo infundida con símbolos de su identidad nacional mexicana. Después de su regreso a México en 1922, se unió a otros pensadores creativos y funcionarios estatales en esfuerzos concertados para revitalizar y redefinir la cultura mexicana tras la Revolución Mexicana (1910-20), un conflicto de una década que mató a más de un millón de ciudadanos .
Junto con contemporáneos como José Clemente Orozco y David Alfaro Siqueiros, Rivera se destacó como uno de los defensores más conocidos del muralismo mexicano, un movimiento patrocinado por el estado destinado a exaltar la historia, la cultura y los ideales posrevolucionarios de la nación en gran escala. murales para espacios públicos.
Los artistas y el público en los Estados Unidos fueron particularmente receptivos con el trabajo y las ideas de Rivera. Comenzó a viajar al norte de las fronteras de México con su esposa, la pintora Frida Kahlo, en 1930, y durante los siguientes cinco años completó los principales ciclos de murales en San Francisco, Detroit y Nueva York, convirtiéndose en una verdadera celebridad del arte internacional. En 1931, fue invitado a montar una exposición retrospectiva en el Museo de Arte Moderno, que tenía solo dos años. Rivera creó ocho murales “portátiles” como la pieza central del espectáculo, incluido el líder Emiliano Zapata (1879-1919).
La utopía comunista de Rivera converge con otra utopía, naturista y vitalista: la de la tierra transformada por el trabajo del hombre liberado de explotación, mientras la mujer, dotada de una energía cósmica, en su sexo fecundado por el hombre, es recreadora de la vida. En los frescos de la capilla de la Universidad de Chapingo, con su Canto a la tierra, Rivera plantea la antítesis de una capilla cristiana: la mujer embarazada, la suya, sustituye a la Virgen, en tanto que otra mujer, Tina Modotti, es representada en escenas de sexualidad omnipresente. A partir de 1945, la ideología sobrevive; recordemos la hoy perdida Pesadilla, con Frida Kahlo repartiendo propaganda del Movimiento por la Paz, made in Stalin. Se desvanece en cambio la utopía. El sueño del universo dominado por el Trabajador es sustituido por la amenaza nuclear.
| Diego Rivera | |
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 Diego Rivera y Frida Kahlo en 1932, fotografía de Carl van Vechten. |
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| Nombre completo | Diego María de la Concepción Juan Nepomuceno Estanislao de la Rivera y Barrientos Acosta y Rodríguez |
| Nacimiento | 8 de diciembre de 1886 Guanajuato Estado de Guanajuato  México |
| Fallecimiento | 24 de noviembre de 1957 Ciudad de México México |
| Nacionalidad | mexicana |
| Movimiento | Realismo, muralismo |
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