«Estoy convencido de que en el arte he tenido razón […] y, aunque mis obras no sobrevivan, sí sobrevivirá la memoria de un artista que ha liberado a la pintura.»
La vida de Gauguin fue de lo más novelesca, se hizo pintor a la avanzada edad de veintimuchos años, había pasado la infancia y adolescencia en Lima, se había enrolado en la marina mercante, se había casado con una danesa y, en fin, se había establecido en París como un próspero agente de bolsa, como si debiera rehacer periódicamente su intensa existencia, antes de su deriva final a los mares del sur. Y, aunque el arte innovador es un buen fondeadero para estos seres inquietos, nadie puede negar que, a través de él, no parara de buscarse los desafíos y complicaciones inimaginables.
Gauguin, el pintor de los mares del Sur
Annah la javanesa, de Paul Gauguin.
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Introducción
El 8 de mayo de 1903 moría en una humilde cabaña de las islas marquesas el pintor francés paul gauguin. terminaba así la vida errante y aventurera de uno de los primeros europeos que buscaron la calma y la felicidad lejos del mundanal ambiente parisiense; y con ella, la de un artista original y excéntríco, de vocación tardía e influencia impresionista, que marcaría profundamente a las nuevas generaciones, y en especial a la de los fauvistas…
